Consejos para un trío sexual sin dramas

Los tríos (y los cuartetos) están en la lista de «cosas que hacer antes de morir» de muchas personas. Estas listas de deseos abarcan desde entrar en la famosa discoteca Berghain de Berlín, acudir a la fiesta de los Oscar y pasarse un año descansando en una hamaca en Koh Phangan hasta participar en una orgía. ¿Pero cómo se puede disfrutar del sexo en grupo sin dramas? Nuestra autora Tina Molin tiene algunos consejos para un trío sexual que te ayudarán.

El trío es la fantasía sexual número uno, tanto para hombres como para mujeres. No es de extrañar, ya que la monogamia no es precisamente fácil. ¡Incluso la ciencia lo corrobora! Después de aproximadamente tres años compartiendo cama con la misma persona, el deseo sexual por la pareja disminuye para ambas partes. Por ejemplo, las ganas de practicar sexo de forma espontánea en cualquier lugar de la casa desaparecen. En lugar de esto, solo quedan Netflix y abrazos. Si el poliamor o una relación abierta están muy alejados de tu zona de confort personal, tal vez un menage à trois sea una buena solución. Por ello os hemos preparado esta pequeña guía con consejos para un trío sexual.

Consejos para un trío sexual: apps para el sexo en grupo

Un trío garantiza la seguridad del amor más la emoción de lo nuevo. Por decirlo de alguna forma, lujuria, satisfacción y éxtasis elevados al cuadrado o al cubo. Una tercera persona significa otra boca que besar, otro par de pechos u otro pene que acariciar y, sin duda, otro par de manos que pueden tocarte. ¿Pero cómo podemos encontrar a la persona adicional necesaria para el sexo en grupo? Al fin y al cabo, no podemos entrar en un bar con un cartel que diga «¿Buscas un trío?». Naturalmente, ya hay una solución: Feeld. Esta aplicación funciona como Tinder (de hecho, anteriormente incluso se llamaba 3nder). En ella puedes encontrar recomendaciones de parejas sexuales cerca de ti y deslizar a la izquierda hasta encontrar el match perfecto para un trío, un cuarteto, una orgía o un gang bang. ¡Bingo!

«Un trío requiere mucha delicadeza y flexibilidad».

Antes del primer encuentro, es conveniente tener en cuenta algunos consejos. Al fin y al cabo, la realidad no suele parecerse a las películas porno. Se pueden producir pellizcos accidentales de la piel, podemos chocar con los codos de la otra persona o tal vez no sepamos qué hacer en un determinado momento. Esto requiere mucha delicadeza y flexibilidad. Habrá que tirar por la borda ideas preconcebidas y aceptar con una sonrisa los momentos incómodos del acto.

Por no hablar de la inestabilidad emocional. Es posible que un hombre que siempre había querido participar en un trío sufra un ataque de celos al ver cómo otro hombre penetra a su pareja en la posición del perrito. O tal vez una novia se empiece a sentir como una sujetavelas o de repente se dé cuenta de que la persona invitada es en realidad un antiguo amante con el que había tenido una aventura anteriormente.

Consejos para un trío sexual: la planificación lo es todo

Por tanto, antes de hacer realidad la fantasía, son necesarias dos cosas: planificación y atención. Hazte la pregunta: ¿qué quiero realmente? ¿Estoy haciendo esto por mí o por él/ella? ¿Qué espero de un trío? Hay quien quiere «porno» y hay quien tal vez quiera un «masaje a cuatro manos» realizado por dos hombres. ¿Qué me parece bien a mí? ¿El otro hombre puede penetrar a tu novia o solo tú puedes hacerlo?

Además, es recomendable reflexionar sobre cómo debe desarrollarse la velada. ¿Cuándo debe finalizar, para que por la mañana todas las personas se levanten con energía? ¿La tercera persona puede quedarse a pasar la noche? ¿Qué ocurre con la higiene? ¿Qué precauciones tomaréis para un sexo seguro? ¿Y tendréis suficientes juguetes a mano?

El siguiente paso es encontrar a la tercera parte. Cuando tengáis un match, es conveniente que os encontréis para descubrir si hay química y si tenéis las mismas expectativas y preferencias. ¿Juegos de bondage? ¿Rituales de masaje tántrico? ¿O algo totalmente diferente? Si tú eres la tercera persona y te reúnes con una pareja, debes comprobar si realmente tienen interés en ti o si no les interesa en absoluto satisfacer tu placer. Las personas expertas en tríos recomiendan prestar atención a frases como: «es un regalo para mi pareja». En esos casos, ¡aléjate!

La gran noche

En la noche elegida, es tan importante disfrutar del sexo como prestar atención a las otras personas. Para que después no se produzca ninguna resaca emocional, es necesario velar por el bienestar de todas las personas participantes. Ninguna de las partes debería sentirse abandonada, ni sexual ni emocionalmente: todas las personas deberían ser el centro de atención durante el acto sexual. Haz contacto visual con tu pareja para asegurarte de que os encontráis bien. Muchas parejas también acuerdan con anterioridad señales de semáforo para el sexo en grupo. El verde significa: «Todo va bien, quiero más». El ámbar: «No lo sé con seguridad, espera». Y el rojo: «¡Para! ¡Inmediatamente!». Durante el juego amoroso, se puede señalizar de esta forma que las cosas han llegado demasiado lejos, sin que esto afecte a la sensualidad. No obstante, para una mayor seguridad, acuérdate siempre de preguntarle a tu pareja si se lo está pasando bien.

¿Y si no os gusta?

Tampoco es ningún problema. En algunas ocasiones, la ilusión es más emocionante que la realidad. En otras ocasiones, el escenario, la tercera persona o el día elegido simplemente no encajan y no conseguiréis excitaros. Si las cosas no funcionan, simplemente di «rojo». Detente. Vete. Todo de forma amable y educada, pero también con decisión. Si todo va bien, escribe un mensaje el día siguiente para dar las gracias. Si se produce una situación dramática, lo único que puede resultar útil es hablar y escuchar. En ocasiones, los tríos permiten descubrir problemas reales de una relación que no se habían observado antes. También pueden aparecer sentimientos de ira, celos e inferioridad y reproches. No tengas miedo de buscar ayuda. Hay coaches y terapeutas que ya han ayudado a muchas parejas a seguir adelante después de situaciones como estas.

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Autor

Frieda trabajó como periodista autónoma durante 10 años y solía escribir sobre recetas de Semana Santa, iconos de estilo, metabolismo humano y restaurantes Michelin. Resumiendo: sobre todo, excepto sobre sexo. Y tenía una buena razón. Durante todos aquellos años, Frieda siempre había considerado que llevaba una vida sexual típica. El cambio llegó después de una ruptura amorosa, momento en el que decidió dejar la píldora, que llevaba tomando 14 años. Fue entonces, a los 28 años, cuando finalmente descubrió su maravillosa sexualidad y encontró su verdadera, única y hambrienta libido. Desde entonces, no solo practica una nueva sexualidad, sino que también escribe y habla sobre ella. ¡Y hoy se siente más satisfecha que nunca!